Editora de Tiempo21 premiada en Encuentro Regional de Género y Comunicación

Por Miguel Díaz Nápoles       

Yami Montoya, editora de Tiempo21, se alzó con el Premio en Periodismo Hipermedia del XI Encuentro Regional de Género y Comunicación, correspondiente a la región oriental, por su sobresaliente producto comunicativo Ancianidad: por una cultura de paz y bienestar.
En el reportaje multimedia narra de forma novedosa la tercera edad como una etapa trascendental en la vida de los seres humanos, aunque para muchos sea tan solo un final triste de su paso por la vida, o la privación del disfrute individual o colectivo, de proyectos nuevos de vida, planes y hasta de nuevas amistades.
A partir de hechos de la vida cotidiana, la autora muestra cómo ese proceso de envejecimiento está marcado por la declinación gradual de las condiciones de salud física y mental, que para nada guarda vinculo con la exclusión social, la cual inicia en muchas ocasiones desde la propia familia.
Así, narra la historia de Maritza, quien a la vuelta de 67 años quisiera pasar desapercibida ante los ojos de quien la busca, cuenta lo que se hace en cuanto a la violencia psicológica en la cotidianeidad del trabajo en la comunidad y obtiene el testimonio de importantes especialistas sobre el tema.
Yami Montoya es periodista, graduada de Comunicación Social en la Universidad de Oriente (2002), Master en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de La Habana, diplomada del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, de La Habana, diplomada en Ciencias de la Comunicación y en Género y Comunicación. Cumplió su servicio social como corresponsal de la Agencia Cubana de Noticias en Las Tunas, y ha obtenido premios en importantes concursos del sector.
Su tesis de grado la desarrolló sobre la labor de las médicas cubanas en Venezuela, donde le dio cobertura informativa al trabajo de los galenos de la Isla en la hermana nación. Es miembro de la Unión de Periodistas de Cuba.
Organizado por la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC) y la Federación de Mujeres Cubanas, la cita territorial contó esta vez con más de un centenar de ponencias, provenientes de los diferentes medios de comunicación y la variedad temática caracterizó los trabajos presentados en el evento, que es organizado cada dos años para debatir acerca del tratamiento del género y la comunicación en los medios y la sociedad.
                                                                                                                                       

La Avellaneda: en torno a una polémica histórica sobre una cubana universal

Por: Hernán Bosch

Citada por el conocido poeta y ensayista Roberto Méndez Martínez, inicialmente en un artículo publicado en el Portal Cubarte y luego en la página web habanaradio.cu, hay una interesantísima anécdota sobre hasta dónde llegaron los avatares de la vida y obra de la gran poetisa camagüeyana del siglo XIX Gertrudis Gómez de Avellaneda (conocida como Tula y “La Peregrina”), de cuyo natalicio celebramos el bicentenario este 23 de marzo.
Precisa Méndez que “a lo largo de su vida y también después de su deceso en Madrid en 1873, la audaz antiesclavista de Sab, la crítica del colonialismo español en América que vio censurada su novela Guatimozín, la que motivara tantas veces el escándalo con sus reivindicaciones del papel social de la mujer, desde su temprano drama Leoncia, ha sido reiteradamente despojada de su condición de cubana y juzgada simplemente como una autora española, aunque ella, de modo explícito, defendiera su vinculación con las letras insulares”.
http://www.tiempo21.cu/index.php/especiales/lecturas/9896-la-avellaneda-en-torno-a-una-polemica-historica-sobre-una-cubana-universal 

Mi recuerdo de dos heroínas

 Trancurría el mes de marzo del año 2000 y las mujeres estábamos inmersas en la celebración del séptimo Congreso de la Federación de Mujeres Cubanas. Mi hija Zandrita había cumplido su primer año de vida y tuve que dejarla bajo loc uidados de su abuela para participar en los menesteres de la reunión femenina. Antes de trasladarme hacia la capital cubana tuve una lesión en el ojo derecho. Al llegar a La Habana fuimos escogidas 15 compañeras para hacer uso de la palabra en la tribuna abierta por la liberación del niño Elián González y Vilma se percató de mi dolencia, con la habitual sencillez que la caracterizaba hizo los trámites para que me atendieran mi malestar.
Al día siguiente recibí de sus propias manos los espejuelos que traigo en esta foto.Con a penas 27 años tuve el privilegio de conocer a dos grandes mujeres de la Revolución Cubana, Vilma Espín  y Melba Hernández.